Nuestra misión consiste en desarrollar el amor de Dios en las almas de los niños y jóvenes de los que nos ocupamos. A través de la educación y de la enseñanza de la juventud, tratamos de formar, con el auxilio de Dios, a los adultos cristianos alegres y fuertes de mañana, capaces de dar testimonio de su fe, en todo lugar en donde tengan que ir o trabajar. Nos ocupamos de colegios, institutos, internados, guarderías… en países de distintas culturas (Francia, España, Estados Unidos). A través de la educación, dispensamos una formación espiritual, humana e intelectual a nuestros alumnos y les proponemos tiempos de oración y de profundización de la fe (escuelas de oración, ejercicios espirituales, convivencias, participación a la JMJ, testimonios, alabanza, adoración del Santísimo, ayuda a los demás…)
Algunas religiosas tienen una formación académica específica de profesora de nivel de preescolar hasta de instituto. Otras, contribuyen a la misión de educación con sus talentos (costura, manualidades, concina, jardinería, mantenimiento, secretaría…).
Todas vemos a Cristo y le servimos en todas las personas que nos rodean, con alegría y disponibilidad.